Hay muchas iglesias en el mundo que creen en Dios. Sin embargo, muchas iglesias no conocen a Dios Madre.
Mucha gente piensa que existe un solo Dios, Dios Padre.
Pero, la Biblia nos dice que no sólo existe Dios Padre sino también Dios Madre.
Y la Biblia nos dice que los hijos de Dios Madre pueden recibir la vida eterna que Dios ha prometido.
Los que creen en Dios Padre y Dios Madre, que vinieron a esta tierra como Espíritu y Esposa en la última época que vivimos, pueden recibir el agua de la vida e ir al cielo eterno.
En esta época, bienaventurados los que conocen, creen y realizan a Dios Padre y Dios Madre.

Amén. Ser hijo de Dios es lo más agradecido y lo más precioso que cualquier otra riqueza o gloria en el mundo. Muchas gracias por amar a este pobre niño.

La razón por la que nuestras vidas son valiosas y preciosas es porque recibimos el amor y las bendiciones del Padre y la Madre celestiales.

Sinceramente agradezco al Padre y la Madre celestiales por haberme levantado entre muertos espirituales, y haberme llamado por mi nombre, aunque soy gran pecador que no merezco nada del reino de los cielos.

¿A quién en este mundo ha testificado Dios que es su hijo y prometido la herencia del cielo?
A nosotros que comimos y bebimos la carne y la sangre de Dios a través de la Pascua del Nuevo Pacto, Dios mismo testificó que se convirtió en nuestro Padre y Madre, y que somos sus hijos. ¿Qué tan feliz y agradecido es esto?
Agradezcamos siempre el amor del Padre y de la Madre celestiales y seamos hijos que acompañan al Padre y a la Madre celestiales hasta el día en que vayamos al cielo.

Por la gracia del Padre Celestial y la Madre Celestial, los pecadores en el Cielo se convirtieron en hijos de los Padres Celestiales. Estoy infinitamente agradecido con el Padre Celestial y la Madre Celestial.

Padre y Madre Celestiales han abierto el camino brillante al reino de los cielos.

Les doy gracias con todo mi corazón por permitirme gran salvación. Y me ayudan tanto en el mundo espiritual como en esta tierra. Los seguiré hasta el final.

doy gracias a Dios Padre y Dios Madre por darme entendimiento~~!~~

Nunca es suficiente para devolver el gran amor que he recibido de Dios Madre; y es imposible medir y comprender el gran amor de la Madre. Madre, muchas gracias por este gran privilegio de convertirme en Su hija celestial.

El Padre Celestial y la Madre Celestial nos permitieron celebrar la Pascua, que contiene la promesa de Su carne y sangre, y nos hicieron hijos celestiales.
Doy gracias al Padre Celestial ya la Madre Celestial por permitirme convertirme en un hijo del Cielo.

Damos gracias a Dios Elohim que nos hizo hijos del Padre Celestial y de la Madre Celestial, que son Dios Elohim.