Así como todos los seres vivientes de esta tierra reciben la vida a través de su madre, nosotros podemos recibir la vida espiritual a través de nuestra Madre espiritual, Dios Madre.

La vida por la madre al final del mismo modo la vida eterna por Dios Madre al fin del mundo.
Sin creen Dios Madre no podemos entrar al reino de los cielos

Soy dichosa. Gracias por poder encontrarme con la Madre Celestial, fuente de la vida, y participar de la promesa de Dios de la vida eterna.

La promesa de Dios para nosotros es la vida eterna (1 Juan 2:25). La Biblia testifica que esta promesa solo se cumple a través de la Madre Celestial. Esta es la voluntad de Dios. Solo aquellos que hacen la voluntad de Dios pueden ir al cielo, por lo que aquellos que niegan a Dios Madre y no la creen nunca irán al cielo. Porque no hicieron la voluntad de Dios. Espero que hagan la voluntad de Dios y reciban la vida eterna y entren en el reino de los cielos.

Aquel que nos lleve al cielo eterno aparecerá como el Espíritu Santo y la Esposa en la última edad del Espíritu Santo. Espero que todo el que vea las profecías de la Biblia se dé cuenta del Espíritu Santo y de la Esposa y entre en el reino de los cielos.

La esposa del Espíritu Santo que nos da el agua de la vida, es decir, la esposa del Cordero es nuestra Madre, que es la Jerusalén celestial. Vayamos al cielo creyendo firmemente y recibiendo a la Madre Celestial.

No hay quien pueda decir que un hombre tiene potesdad de dar la vida eterna ni el agua de vida a otro como él. Por más que muchos pasen por encíma de que la Esposa nos da agua de vida, la Biblia y los profetas de Dios han dicho con claridad y certeza que la Esposa tiene potestad de dar a la humnidad la vida eterna, pues, Ella es Dios Madre.

Agradecemos a la Madre Celestial por su gracia y amor, que vino a esta tierra en carne para darnos la vida eterna que Dios nos ha prometido.

Los hijos de Dios son decididos por Dios. Hijos de Dios deben ser hijos de la promesa quien cree en Dios Madre. Nos convertimos en los que reciben la palabra según la palabra y son horneados por Dios.

Está profetizado que Dios Padre y Dios Madre, que existen de eternidad en eternidad, vendrán a esta tierra en esta última epoca como el espíritu y la esposa para darnos agua de la vida gratuitamente. Por lo tanto, aceptemos y creamos en Dios Padre y Dios Madre que son nuestros salvadores y prediquemos Su gran noticia de salvación al mundo.