Nuestra esencia no está en nuestra carne, sino en nuestro espíritu.
GÉNESIS 2/7[ Entonces Jehová Dios formó al hombre del polvo de la tierra, y sopló en su nariz aliento de vida, y fue el hombre un ser viviente.]
El libro de Génesis nos muestra no solo la creación del cuerpo, sino también la creación del alma.
Podemos entender, por el versículo anterior, que nuestra carne es el ser de barro y que el aliento de vida Dios, quien es espíritu, es el ser espiritual.
ECLESIASTÉS 12/7 [ y el polvo vuelva a la tierra, como era, y el espíritu vuelva a Dios que lo dio. Vanidad de vanidades, dijo el Predicador, todo es vanidad. ]
Aquí dice que el polvo es el cuerpo, y el espíritu es el aliento de vida salido de Dios.
Jesús llamó ´´alma ´´al aliento de vida.
LUCAS 12/20 [ Pero Dios le dijo: Necio, esta noche vienen a pedirte tu alma; y lo que has provisto, ¿de quién será? ]
Como el polvo llegó a ser un cuerpo humano, así también el aliento de vida de Dios llegó a ser un alma humana.
El hecho de que Dios pida el alma del hombre indica que retira el aliento de vida que sopló en él.
Y Jesús enseñó que la muerte del cuerpo es diferente de la del alma.
MATEO 10/28 [Y no temáis a los que matan el cuerpo, mas el alma no pueden matar; temed más bien a aquel que puede destruir el alma y el cuerpo en el infierno ]
Por lo tanto, la muerte del cuerpo es la muerte primera, y la muerte del alma es la muerte segunda.