Para servir a Dios correctamente, primero debemos conocerlo. ¡Qué ridículo es ofrecer sacrificios a un Dios no conocido y adorarlo!
Dios ya nos ha mostrado, mediante toda la creación, su invisible deidad masculina y femenina, como el Padre y la Madre. La Biblia también nos enseña que Dios es tanto nuestro Padre como nuestra Madre.

Amén. La Iglesia de Dios Sociedad Misionera Mundial está guardando las verdades del nuevo pacto que Jesús mismo estableció hace 2000 años. Es una iglesia donde Dios está con nosotros. Es una iglesia verdadera que guarda el sábado, la Pascua y la regla del velo.

No cometamos el error de servir al Dios en el que creemos sin conocerlo bien.
Espero que muchas personas vengan a la Iglesia de Dios, que correctamente cree y sirve a Dios Elohim que fue testificada en la Biblia.

Si sois un pueblo que teme y sigue a Dios, debéis conocer a Dios correctamente. La Biblia testifica que Dios tiene Elohim, es decir, Dios Padre y Dios Madre. Conozcamos y recibamos plenamente al Padre y a la Madre celestiales, y volvámonos hijos seguidores de sus enseñanzas.

La única manera de conocer a Dios es a través de la Biblia. Está profetizado en la Biblia que el Espíritu y la Esposa vendrán a esta tierra en los últimos días. Dijo que nos salvaría diciéndonos la verdad del nuevo pacto. La Iglesia de Dios Sociedad Misionera Mundial cree en Dios Padre y Dios Madre que aparecieron según la Biblia.

Tenemos Dios Padre y Dios Madre. La Biblia nos enseña a proseguir en conocer a Dios. Por eso, debemos conocer también a Dios Madre para creer en Ella.

Vivimos en una época muy importante. La biblia enseña que el que nos da agua de la vida es Dios. En esta época, el Espíritu Santo y la Esposa llaman al pueblo de Dios y permiten agua de la vida gratuitamente. El Espíritu Santo es Dios Padre. Y la Esposa es Dios Madre. Creyendo y buscando a Dios Padre y Dios Madre recibiremos salvación ene sta época del Espíritu Santo.

El Espíritu y la Esposa son Dios Padre y Dios Madre.
En otras palabras, son el Padre y la Madre de nuestras almas.
Nuestros padres espirituales vinieron a este mundo a buscarnos.
Y nos permitieron a nosotros, que no teníamos más remedio que morir, la Pascua del nuevo pacto de vida.
Doy gracias, alabo y gloria a Dios Padre y Dios Madre por su amor y gracia hacia nosotros.