Ya que este mundo no supo el camino hacia el reino de los cielos, Jesús lo enseñó siendo el camino, la verdad y la vida. Cuando andemos por este camino si apartarse a la derecha ni a la izquierda, podremos alcanzar al reino eterno.

Jn.13:15 porque ejemplo os he dado, para que como yo os he hecho, vosotros también hagáis.

Antes que Jesús viniera a esta tierra, y mostrara los ejemplos, nadie podía saber el camino recto hacia el reino eterno en cual ninguno caminaba. Él puso este camino con sus obras. Por lo tanto, los que andan por este camino, podrán llegar al destino de la fe. Uno de ellos es el día de reposo.

Lc.4:16 Vino a Nazaret, donde se había criado; y en el día de reposo entró en la sinagoga, conforme a su costumbre...

Guardar el día de reposo era costumbre de Jesús. En su vida evangélica él guardaba el día de reposo en cada semana. Entonces, ¿ por qué lo guardaba siendo el Señor del día de reposo ? Para si mismo, no era necesario guardarlo. La razón por la que lo guardó es para nuestra enseñanza. Por tanto, los que lo guardan estan andando el camino recto hacia el reino eterno.
Segundo es la Pascua del nuevo pacto.

Mt.26:26~ mientras comían, tomó Jesús el pan... Tomad, comed, esto es mi cuerpo. Y tomando la copa...Bebed de ella todos porque esto es mi sangre del nuevo pacto que por muchos es derramada para remisión de los pecados.

Él vino a darnos la vida eterna. Ya que la paga del pecado es la muerte, los que reciban la remisión de los pecados podrán tener la vida eterna. Por esta razón, Jesús hizo la Pascua y mandó a guardarla hasta el fin del mundo. La Pascua del nuevo pacto es el camino recto.
Así, podemos entender en cuál camino debemos andar para entrar en el reino de los cielos por las obras de Jesús. Sin embargo, los cristianos que dicen creer en él, no andan en camino recto sino en el desviado guardando culto dominical y la Navidad. Jesús les reprendió.

Lc.6:46 ¿ por qué me llamáis, Señor, Señor, y no hacéis lo que yo digo ?

Él también claramente dijo que ellos nunca podrían entrar en el reino eterno.

Mt.7:21 No todo el que me dice, Señor, Señor, entrará en el reino de los cielos, sino el que hace la voluntad de mi Padre que está en el cielo.

Aquí, dice que solo el que haga lo que Jesús mostró y hizo podrá entrar en el reino de los cielos.
Ahora hay innumerables creyentes en Jesús como la arena del mar en este mundo. Ellos hacen muchas cosas en su fe pensando que entrarían en el reino eterno. Pero, el reino eterno está lejos más allá de ellos porque no andan el camino recto.